El Sindicato de Trabajadores de la Construcción del Brazo Aña Cua – Margen Derecha advierte sobre la notificación de despido de 350 obreros y la posible paralización de la construcción de la Central del brazo Aña Cua. La Entidad Binacional Yacyretá exige la reanudación de los trabajos en un intento por evitar más atrasos.
SITRACBAMD alerta sobre despidos masivos
El abogado Vidal Cáceres, representante jurídico del Sindicato de Trabajadores de la Construcción del Brazo Aña Cua – Margen Derecha (SITRACBAMD), ha emitido una advertencia preocupante. Según Cáceres, se avecinan despidos masivos de 350 obreros paraguayos que trabajan en la construcción de la Central del brazo Aña Cua.
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El SITRACBAMD sostiene que este despido masivo es el resultado de un conflicto entre la entidad contratante y la contratista. Aparentemente, no existe una razón justificada para que el Consorcio Aña Cua rescinda los contratos laborales de estos trabajadores, especialmente después de que la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) emitió una notificación para que la contratista reanudara las operaciones en varios frentes de trabajo.
Las operaciones debían reanudarse el 8 de enero de 2024, pero se ha prolongado una semana más debido a un receso no programado. Ahora, se teme que el Consorcio Aña Cua rescinda los contratos de casi el 90% de los obreros, lo que representa un grave problema, ya que la mayoría de estos trabajadores son originarios de la zona de Ayolas.
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La exigencia de Yacyretá
El 10 de enero de 2024, la Entidad Binacional Yacyretá envió una nota al Ing. Páscuale Buonanno, representante del consorcio, en la que exigía la reanudación de los trabajos en un plazo de 48 horas hábiles después de recibir la notificación. Esto se hizo con el objetivo de cumplir con las obligaciones contractuales pendientes.
En la comunicación, se califica la extensión del receso vacacional de fin de año 2023-2024, decidida unilateralmente por el Consorcio Aña Cua WRT, como inentendible e inadmisible. Esta prolongación afecta negativamente el avance de los trabajos y agrava los retrasos ya existentes en el proyecto.
El contratista ha sido advertido de que cualquier demora causada por su decisión unilateral, así como las demoras atribuibles a la no ejecución de los trabajos en los frentes disponibles, serán consideradas como una suspensión de la obra debida a su falta o negligencia, de acuerdo con los términos del contrato.
Fuente: ABC Color.
