Las barcazas de bandera paraguaya navegan actualmente sin ningún tipo de retenciones. Se aguarda que el gobierno argentino designe prontamente a sus representantes en el Comité Intergubernamental de la Hidrovía (CIH), que quedó paralizado luego de los recientes comicios presidenciales vecinos.
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Tanto en la Cancillería paraguaya como en el Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay (CAFYM) admitieron que pese a desconocer al flamante funcionario argentino Gastón Benvenuto, las perspectivas son alentadoras respecto a un entendimiento definitivo sobre el cobro del peaje en la vía fluvial internacional.
“No conozco al nuevo interventor del lado argentino. Pero mantenemos una visión optimista en lo concerniente a la cuestión del peaje. Nuestras conversaciones son fluidas con el gobierno de Milei. Es algo habitual en este tipo de coyunturas cuando asumen nuevas administraciones”, señaló a LPO Blas Alfredo Felip, director de Comercio Exterior de la Cancillería.
Felip indicó que en Paraguay aguardan la comunicación formal de la Cancillería argentina sobre la reciente designación y el reinicio del proceso de diálogo en el seno del CIH, que se encontraba suspendido luego de los comicios en el país vecino. Para el gobierno de Santiago Peña, el cambio político en Argentina significó un respiro tras el deterioro en las relaciones con Sergio Massa y los obstáculos para negociar la tarifa del tributo fluvial.
Por su parte, Raúl Valdez, presidente de CAFYM, aseguró que la situación en el paso fronterizo continúa sin novedades relevantes, y sin exigencias de pago del peaje.
“Se opera con normalidad. Algunas compañías abonan, otras no, pero a nadie se le presiona. No hay retenciones de barcazas”, afirmó.
En realidad, la falta de cobranza expresa más la ausencia de controles por la nueva gestión argentina que un gesto de Milei hacia Paraguay.
En setiembre de 2022, la Cancillería paraguaya informó sobre el acuerdo por el que el gobierno argentino de Alberto Fernández suspendía la percepción del tributo para embarcaciones de pabellón foráneo y el bloqueo de barcazas por 60 días. La medida buscaba distender la tensión con Peña.
El lapso de suspensión apuntaba a que el CIH evaluara la legalidad del gravamen mediante un análisis técnico. Según Fernández, el pacto estaba próximo y ya contaba con el respaldo de Brasil, Bolivia y Uruguay para zanjar la disputa, pero el triunfo del libertario implicó reiniciar las tratativas sobre el peaje.
A fines de 2022, una delegación paraguaya se sumó a la inspección técnica por la zona de obras en la hidrovía, en Corrientes. Para CAFYM, la verificación evidenció que el dragado no se concretó y que el servicio de conservación del lado argentino es deficiente, por lo que no justifica peaje alguno. Las autoridades argentinas afirmaban lo opuesto y atribuían la polémica a un asunto doméstico de Paraguay.
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En campaña, Milei había anticipado que respetaría los contratos privados y, por ende, los transportistas locales de Paraguay esperan que el cobro del tributo sea levantado apenas se acomoden las nuevas autoridades argentinas.
El presidente debe convocar a licitación, con un esquema similar al que rigió por 25 años, cuando Carlos Menem otorgó el dragado y balizamiento a Emepa y Jan de Nul, a cargo del cobro del peaje.
Fuente: LPO
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