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Peligro invisible: Monóxido de carbono

Cuatro jóvenes mueren en Brasil por inhalación de monóxido de carbono. Un experto explica qué es este gas, dónde se encuentra y cómo prevenir intoxicaciones.

Muerte de jóvenes en Balneário Camboriú. Foto: Misiones Online

En un trágico incidente en la ciudad brasileña de Camboriú, cuatro jóvenes perdieron la vida sin signos de violencia aparente. Las investigaciones apuntan hacia una causa sorprendente: la intoxicación por monóxido de carbono, un gas mortal que es invisible, insípido e inodoro. En este artículo, exploraremos qué es el monóxido de carbono, dónde se encuentra y cómo puedes protegerte de este peligroso asesino silencioso, especialmente durante los meses de invierno.

¿Qué es el monóxido de carbono? El monóxido de carbono (CO) es un gas altamente tóxico que se produce durante la combustión incompleta de materiales que contienen carbono, como la madera, el gas natural, el petróleo y el carbón. A menudo, es conocido como “el asesino silencioso” debido a su capacidad para pasar desapercibido. No tiene color, olor ni sabor, lo que lo hace prácticamente indetectable sin dispositivos especializados.

¿Dónde se encuentra el monóxido de carbono? Las fuentes más comunes de monóxido de carbono incluyen los escapes de vehículos y cualquier proceso de combustión de biomasa. En Paraguay, durante la temporada de invierno, los braseros representan un riesgo significativo de intoxicación por monóxido de carbono en espacios cerrados. El uso prolongado de braseros en lugares poco ventilados puede aumentar el nivel de CO en el aire, creando un ambiente peligroso.

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Dormir en vehículos con el motor encendido y las ventanas cerradas también puede exponer a las personas al monóxido de carbono, ya que los gases de escape pueden filtrarse en el interior del automóvil.

Síntomas de intoxicación por monóxido de carbono La exposición al monóxido de carbono puede tener efectos perjudiciales en la salud humana. Los síntomas de intoxicación por CO pueden variar, pero los más comunes incluyen:

  • Mareos.
  • Dolor de cabeza.
  • Fatiga.
  • Somnolencia.
  • Confusión.
  • Náuseas y vómitos.

Es esencial recordar que, debido a la ausencia de signos visuales o de olor del monóxido de carbono, es difícil detectar su presencia sin un detector de CO adecuado. Por lo tanto, es fundamental estar alerta a los síntomas y tomar precauciones para prevenir la exposición.

Prevención de la intoxicación por monóxido de carbono Para evitar la intoxicación por monóxido de carbono, especialmente durante los meses de invierno o cuando se utilizan aparatos de calefacción y combustión en espacios cerrados, se deben seguir estas pautas de seguridad:

  1. Instalar detectores de monóxido de carbono en áreas donde se usen dispositivos de combustión, como cocinas, calefacciones y calentadores de agua.
  2. Realizar un mantenimiento regular de los aparatos de calefacción y combustión para garantizar un funcionamiento seguro.
  3. Evitar dormir en vehículos con el motor encendido, incluso si hace frío. Si es necesario, mantener las ventanas abiertas para permitir la ventilación.
  4. Nunca utilizar braseros o estufas de gas en espacios cerrados sin una adecuada ventilación.
  5. Mantener los conductos de escape de vehículos en buen estado y revisarlos periódicamente para detectar posibles fugas de monóxido de carbono.

En caso de exposición Si se sospecha de una exposición al monóxido de carbono, es importante tomar medidas inmediatas:

  • Salir al aire libre y buscar un lugar con aire fresco.
  • Buscar atención médica de inmediato si se experimentan síntomas de intoxicación por monóxido de carbono.
  • No regresar al área contaminada hasta que un profesional confirme que es seguro hacerlo.

Fuente: ABC Color.