Óscar Venancio Núñez fue condenado a 11 años de cárcel. Gentileza ÚH
En una situación que ha captado la atención de la opinión pública, el ex gobernador Óscar Ñoño Núñez y el ex director de la Policía Municipal de Tránsito, Juan Villalba, se encuentran compartiendo celda en el Departamento Judicial de la Policía Nacional.
Mientras Núñez espera la asignación de su lugar de reclusión tras ser condenado a 11 años de prisión, Villalba enfrenta cargos por violencia familiar.
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El pasado viernes, Óscar Ñoño Núñez fue trasladado al Departamento Judicial de la Policía Nacional después de recibir su condena por el desvío de fondos durante su mandato como gobernador. Su destino final aún no ha sido determinado, por lo que se espera que pase todo el fin de semana en esta sede policial, la cual se encuentra abarrotada con 130 reclusos en espera de resolución.
El Tribunal de Sentencia determinó que parte de los fondos desviados por la administración de Núñez provenían del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide), destinados originalmente para mejorar la educación en el departamento de Presidente Hayes. Estos fondos fueron utilizados en pagos de deudas relacionadas con carreras de caballos y otros fines indebidos.
En cuanto a su condena, la Fiscalía había solicitado 15 años de prisión, pero finalmente se le impusieron 11 años, además de la prohibición de ejercer cargos públicos por una década. Varios otros implicados en el caso también recibieron condenas, mientras que una persona fue absuelta.
Un aspecto intrigante de este caso es la posible estrategia de Ñoño Núñez de esperar una nueva dilación de la sentencia para beneficiarse de la ley de la devolución premiada, que actualmente cuenta con media sanción. Esta ley, propuesta por el diputado cartista Yamil Esgaib, busca recuperar bienes patrimoniales desviados por funcionarios públicos a cambio de reducir sus penas hasta en un 50%.
Por otro lado, Juan Villalba, compañero de celda de Ñoño Núñez, enfrenta una situación diferente. Fue detenido el 7 de diciembre por un caso de violencia familiar, tras ser denunciado por su cuñada.
A pesar de que su esposa negó ser víctima de violencia, la Fiscalía ordenó la prisión preventiva, siguiendo la legislación vigente que obliga al Ministerio Público a investigar y procesar casos de violencia.
Juan Villalba había ocupado el cargo de director de la Policía Municipal de Tránsito entre marzo y agosto de este año, antes de ser destituido debido a cuestionamientos sobre su gestión. Su situación actual lo mantiene junto a Ñoño Núñez en una situación inusual en el Departamento Judicial de la Policía Nacional, a la espera de que sus destinos se definan en los próximos días.
Fuente: Última Hora
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