Foto: Gentileza.
Comerciantes del Mercado de Abasto levantan la voz de alarma. Se avecina una crisis: la escasez de tomates y la posible subida de sus precios amenazan con desestabilizar el pulso del mercado. Según los comerciantes, la insuficiente oferta de los productores nacionales para cubrir la demanda del año pone en riesgo la estabilidad de los precios y la economía local.
El precio actual del kilo de tomate se mantiene en G. 12.000, pero los comerciantes temen que este valor experimente un aumento significativo en las próximas semanas. Adolfo Sosa, uno de los comerciantes afectados, ha expresado su preocupación y ha solicitado la intervención del Ministerio de Agricultura para abordar la situación.
Los comerciantes han recorrido diversas regiones, incluyendo Caaguazú, Central, Caraguatay, Vaquería, y Tres Corrales, en busca de tomates. Pero la búsqueda ha sido infructuosa. Solo encontraron a dos productores que ofrecían tomates a G. 12.000 el kilo, un precio que podría resultar en un costo aún más elevado para los consumidores finales.
Sosa ha llamado la atención sobre la importancia de los comerciantes en la cadena económica del país y ha pedido al ministro de Agricultura, Carlos Giménez, que modere su discurso hacia ellos. Según Sosa, la actitud cerrada del ministro y su favoritismo hacia algunos sectores solo agravan la situación. Los comerciantes exigen un acercamiento con el ministro para discutir la problemática y encontrar soluciones colaborativas.
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La escasez de tomates y la posible subida de sus precios no solo afectan a los comerciantes, sino también a los consumidores y a la economía local. Es necesario que las autoridades tomen medidas para garantizar la estabilidad de los precios y la disponibilidad de este producto básico en el mercado.
Fuente: El Nacional.
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