Una llamada anónima alertó sobre una supuesta bomba en las instalaciones del Palacio de Justicia. La exigencia del desconocido era clara y tajante: la liberación de Carmen Villalba.
Era poco después del mediodía del miércoles cuando la central telefónica del recinto judicial recibió el inquietante mensaje. Una voz masculina advirtió que si Carmen Villalba no era liberada a las 12:45, una bomba explotaría en la sede judicial.
Ante tal amenaza, se activaron de inmediato los protocolos de seguridad y se procedió a la evacuación de las dos torres del Poder Judicial. Todos los pisos fueron desalojados y se solicitó a todas las personas que se alejaran varios metros de distancia del edificio.
Entre las audiencias que se estaban desarrollando en el momento de la amenaza, se encontraba la del caso conocido como “tapabocas de oro”, donde está procesado el expresidente de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac), Édgar Melgarejo.
Las unidades de las fuerzas públicas se hicieron presentes en el lugar para investigar la veracidad de la amenaza. Mientras tanto, la incertidumbre y la tensión se apoderaron del lugar.
Fuente: ABC Color.
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