Yamil Esgaib retorna al Parlamento post suspensión disciplinaria

Esta mañana se dio el regreso del diputado Yamil Esgaib a la Cámara de Diputados, tras una ausencia de 30 días por una sanción disciplinaria. Esta medida fue impuesta después de que Esgaib realizara comentarios machistas y agresiones verbales hacia sus colegas parlamentarias, y restara importancia a temas tan graves como los feminicidios, calificándolos de “pavada”.

El retorno de Esgaib se produjo en un contexto donde la violencia de género y el lenguaje machista están en el punto de mira de la opinión pública y las organizaciones sociales. El diputado retomó su actividad legislativa participando activamente y promoviendo un proyecto que busca una auditoría externa sobre deudas del anterior gobierno, señalando su interés en retomar su agenda política.

La sanción, que tuvo lugar el pasado 4 de octubre, fue solicitada por la diputada Rocío Vallejo, del Partido Patria Querida, quien fue objeto de una amenaza por parte de Esgaib, quien le dijo que le “rompería la boca”. No fue un incidente aislado, ya que la senadora Celeste Amarilla también fue agredida verbalmente en una sesión de la Comisión Bicameral de Presupuesto, cuando el político le amenazó con golpearla.

El historial de confrontaciones de Esgaib se extendió a su colega Johanna Ortega, a quien ofendió llamándola “perra peligrosa”. Además, alcanzó a la esfera mediática, acosando a la periodista Rocío Pereira de Telefuturo y NPY durante una transmisión en vivo.

Estos actos de agresión verbal y actitudes machistas no han pasado desapercibidos para la ciudadanía, que a través de redes sociales y otros medios han expresado su repudio. Incluso dentro del ámbito político, estas acciones han generado un debate sobre la conducta aceptable y los límites en el discurso público.

En una sesión, Yamil Esgaib presentó disculpas públicas a sus colegas por sus comentarios inapropiados, aunque sus palabras no mitigaron las críticas, ya que calificó su sanción “como unas vacaciones”, lo cual fue interpretado por muchos como un desdén hacia la gravedad de sus actos y la sanción impuesta.

Fuente: Última Hora.

 

Esta web usa cookies.