Juan Martens. Foto: Última Hora.
El criminólogo y experto en seguridad, Juan Martens, sostiene que será un desafío lograr un cambio significativo en la lucha contra el crimen organizado en Paraguay mientras el Partido Colorado siga en el poder. Martens expresó sus preocupaciones durante una entrevista con radio Monumental 1080 AM, comentando sobre el reciente informe del Índice Global de Crimen Organizado.
Según el informe, los criminales en Paraguay tienen un nivel alarmante de influencia dentro de la sociedad y las estructuras estatales. Martens comparó la situación actual de Paraguay con la de México y Colombia, dos países conocidos por sus problemas con el crimen organizado y la narcopolítica.
“Nos parecemos cada vez más a México y Colombia”, dijo Martens. “Estamos viviendo una realidad caracterizada por impunidad, aprovechamiento de factores estructurales y una protección cada vez más notoria de la narcopolítica”.
Martens indicó que el informe destaca las oportunidades perdidas para combatir el crimen organizado en Paraguay. “El informe nos muestra todo lo que se pudo haber hecho, pero no se hizo porque hay gente que se enriquece”, afirmó.
Al ser consultado sobre la posibilidad de un cambio en la lucha contra el crimen organizado con el Partido Colorado en el poder, Martens fue pesimista. “Yo veo muy difícil el cambio con estos actores», dijo. “Hay muchas personas del Partido Colorado vinculadas directamente. Primero fueron narcos y luego políticos”. Acusó a estas figuras de utilizar al Estado para que sus negocios ilícitos prosperen.
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Martens criticó la falta de reformas institucionales y legales para enfrentar el problema del crimen organizado en Paraguay. También señaló la ausencia de control del espacio aéreo, fronterizo y fluvial. En particular, mencionó la hidrovía Paraguay-Paraná como una vía principal para el tráfico de mercancías ilícitas por parte de organizaciones transnacionales.
Además, criticó a instituciones como el Ministerio de Justicia por su falta de propuestas para solucionar el problema y por permitir que el crimen organizado tome el control de las cárceles. “Debieran ser centros de tratamiento y no centros de articulación de la criminalidad organizada”, lamentó.
El cultivo de marihuana, la presencia del Primer Comando de la Capital (PCC) y la narcopolítica son algunos de los ocho factores que llevaron a nuestro país a ocupar el cuarto lugar entre los países con mayor criminalidad organizada del mundo, luego de México y Colombia.
Fuente: Última Hora.
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