En la humilde vivienda de Tava’i, Caazapá, se desencadenó una tragedia que movilizó a la comunidad y a las autoridades: un niño de 12 años fue asesinado tras intentar proteger a su madre de intrusos.
Esta semana, los esfuerzos de las autoridades fructificaron con la detención del principal implicado en el incidente.
Desplegándose en 10 allanamientos simultáneos durante las primeras horas del jueves, la Policía Nacional y la Fiscalía se sumergieron en las calles de Caazapá. La determinación era clara: hallar a los responsables del asalto y homicidio.
Mario Misael Cuevas Espínola, alias “Tolaí”, de 47 años, fue aprehendido en su residencia en San Juan Nepomuceno. En el sitio, los oficiales incautaron una escopeta, municiones, celulares y vestimenta que vincularía a Cuevas con el crimen.
El Comisario César Diarte, jefe de Investigación de Caazapá, esclarece un entramado más complejo detrás del hecho. Todo comenzó hace un mes cuando disparos inquietaron al padrastro del joven fallecido. Al investigar, encontró a Cuevas y a otros tres individuos en su propiedad.
Este enfrentamiento inicial desencadenó amenazas por parte de Cuevas, quien, según fuentes, prometió cambiarle “un diente de oro por uno de plomo”.
El equipo policial también revela una faceta delictiva en los implicados: el abigeato. Se cree que faenaron al menos dos animales de la propiedad de las víctimas. Cuevas ya tenía antecedentes y orden de captura por otros hechos similares.
En una nota adicional, un hombre llamado Darío Martínez, tío del joven fallecido, fue blanco de un ataque el miércoles por la noche. Afortunadamente, pudo evadir a sus agresores, y la policía activó un operativo para su rescate.
Fuentes: Última Hora / ABC Color
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