La víctima del hecho de privación de libertad en plena declaración. Foto: Ministerio Público.
La Fiscalía Antisecuestro, liderada por el Ministerio Público, está inmersa en un profundo análisis del caso de Édgar Ayala. El joven comerciante, de 27 años, presuntamente involucrado en actividades de narcotráfico, fue secuestrado en Luque y liberado a las pocas horas.
Las primeras investigaciones aluden a la posibilidad de que detrás del secuestro haya esquemas vinculados con el narcotráfico.
Una pieza clave de evidencia que fue el video de circuito cerrado que captó el momento exacto del secuestro. Cinco agentes de la Policía Nacional fueron identificados en las imágenes. Todos estos uniformados pertenecen a la división de Investigaciones de Asunción.
Cuatro de estos agentes se presentaron por sí mismos a las autoridades. El quinto hizo lo mismo, aunque horas más tarde. Actualmente, todos están detenidos en la Agrupación Especializada.
El fiscal Federico Delfino, a cargo de la Unidad Especializada de Antisecuestro y Antiterrorismo, imputó a estos oficiales por privación de libertad, robo agravado y asociación criminal.
Además de los cinco agentes, los investigadores están tras la pista de una sexta persona, un civil, que al parecer también estuvo involucrado en el hecho, según informes de Telefuturo.
Otro punto que refuerza la hipótesis de narcotráfico es la desaparición de 30 kilos de marihuana. Se presume que esta cantidad de droga estaba en posesión de Ayala en el momento de su secuestro.
A pesar del grave incidente, al ser examinado por el médico forense Miguel Zacarías, se determinó que Édgar Ayala no presentaba signos de violencia.
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