Foto: Gentileza.
La controversia se ha desatado luego de que el parlamentario colorado cartista Basilio “Bachi” Núñez propusiera despedir a unos 30.000 funcionarios públicos para solventar el déficit del almuerzo escolar, en caso de la derogación definitiva del acuerdo con la Unión Europea (UE).
Esta propuesta surge en un momento crítico, ya que la donación de 38 millones de euros otorgada por la UE a Paraguay para ser utilizada en educación está en riesgo, lo cual apeligra el almuerzo y el kit escolar para cerca de 50.000 niños y adolescentes de la capital, informo el diario ABC Color.
Para “Bachi”, la solución radica en la optimización de los gastos del gobierno, lo que implicaría el despido masivo de funcionarios.
“Vamos a sacar 30.000 funcionarios públicos, de los 70.000 que metió este Gobierno y, en vez de tener planilleros, vamos a llevar eso a los niños”, argumentó.
Esta propuesta ha generado una fuerte respuesta tanto de la oposición como de diferentes sectores de la sociedad. Muchos cuestionan si los despidos propuestos son una solución viable y ética para abordar el problema.
En un país donde el almuerzo escolar puede ser la única comida que muchos estudiantes reciben en el día, la necesidad de mantener este recurso es vital.
Desde el Ministerio de Educación, la preocupación es evidente. Las autoridades afirman que los fondos para el almuerzo escolar sólo están garantizados hasta el próximo 11 de septiembre, lo que pone en evidencia la urgencia de encontrar una solución sostenible.
La discusión sobre la propuesta de “Bachi” Núñez refleja una problemática más amplia en Paraguay acerca de la gestión de los recursos públicos y la eficiencia en el gasto gubernamental.
Mientras la derogación de la donación de la UE sigue en debate, la búsqueda de una solución justa y equitativa se convierte en un desafío crucial para el gobierno y la sociedad paraguaya.
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