El cine paraguayo sigue avanzando y buscando dejar su huella en la historia y cultura del país. En esta ocasión, los cineastas Dan Morínigo y Giselle Machado, conocidos por su trabajo en “Tres días para Navidad”, se preparan para filmar “Ignacio. Mi tierra, mi sangre”. Esta película tiene como objetivo retratar parte de la Guerra de la Triple Alianza y generar un impacto social significativo.
El rodaje de “Ignacio” comenzará este sábado y contará con la participación de talentosos actores como Celso Franco y Mario Toñánez. Pero no solo eso, sino que también involucrará a unos mil cadetes de la Academia Militar “Mcal. Francisco Solano López”, lo que sin duda le dará un toque auténtico y realista a la historia.
El protagonista de esta película será el joven Ezequiel Báez, quien dará vida al niño contemporáneo a la Guerra del ’70, cuya vida se verá marcada por los acontecimientos históricos que vivió el Paraguay en ese entonces. La trama se centrará en tres importantes batallas de la guerra: Tuyutí, Piribebuy y Acosta Ñu.
El cineasta peruano Juan Carlos Oganes, conocido por su trabajo en “Gloria del Pacífico”, será el encargado del montaje de los escenarios bélicos y de acción en «Ignacio”. Carlos Samudio, por otro lado, se encargará de la dirección de actores.
La producción estima que el rodaje durará aproximadamente un mes, y durante una conferencia de prensa en el Ministerio de Defensa Nacional, expresaron su entusiasmo y compromiso con el proyecto.
“Ignacio. Mi tierra, mi sangre“ busca ser mucho más que una película de época. Los cineastas aspiran a generar un impacto social y despertar el nacionalismo y patriotismo en el pueblo paraguayo.
La cinta pretende mostrar la historia desde la óptica de un niño, sus compañeros de colegio y los docentes de esa época, permitiendo a las nuevas generaciones conocer sus raíces y valores como nación.
La invitación del cineasta peruano Juan Carlos Oganes a sumarse a este proyecto resalta la importancia de contar y educar a través del cine. “Ignacio” no solo busca entretener, sino también brindar un contenido real y reflexivo sobre la historia del país y el sacrificio de los antepasados.
El equipo de producción destaca el desafío que representa llevar adelante una película de época y agradece el apoyo logístico recibido desde distintas instituciones estatales, especialmente desde las Fuerzas Armadas.
El nombre “Ignacio”, que significa “el que nació de entre las cenizas”, simboliza el resurgimiento del pueblo paraguayo tras la devastadora guerra.
«Ignacio. Mi tierra, mi sangre” promete ser una obra cinematográfica con un fuerte contenido histórico y emocional, una oportunidad para que los espectadores reflexionen sobre el pasado y valoren aún más la identidad y cultura de su nación. El cine paraguayo se afianza y sigue enalteciendo la rica historia de Paraguay a través del séptimo arte.
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