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Condena de la Corte IDH: Tortura en Paraguay evidencia fallos judiciales

La Corte IDH condena a Paraguay por un caso de tortura en el año 2000. Se exige investigación, sanciones, capacitación y compensación como formas de reparación, buscando fortalecer los derechos humanos y el sistema judicial paraguayo.

Acto de notificación de la sentencia por parte de la Corte IDH. Foto: Captura de video ÚH.

La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) ha sentenciado a Paraguay en un caso perturbador de detención ilegal, tortura y violación de las garantías y protección judicial.

El incidente se remonta al año 2000, durante el mandato del Ministro del Interior Walter Bower, y ha puesto al descubierto fallas significativas en el sistema judicial paraguayo.

El caso en cuestión involucra a Jorge López Sosa, un oficial inspector de la Policía Nacional, cuya detención se produjo en medio de un estado de excepción bajo el gobierno de Luis Ángel González Macchi.

Este estado fue la respuesta a un intento fallido de golpe de Estado por parte de un grupo de militares retirados y oficiales de menor rango en apoyo a Lino César Oviedo, en aquel entonces exiliado.

El 17 de mayo, el juez Ricardo Pérez Manrique, presidente del Tribunal, leyó la sentencia en una transmisión en vivo en YouTube desde la cuenta de la Corte IDH. El fallo establece la responsabilidad del Estado paraguayo por unanimidad y condena al país a tomar medidas concretas para rectificar las injusticias.

Además de reconocer el sufrimiento de López Sosa, la Corte IDH ha ordenado al Estado paraguayo que realice una serie de acciones para reparar y prevenir futuros actos de tortura. Entre ellas se incluyen la promoción de investigaciones para juzgar y sancionar a los responsables de la tortura, el diseño de programas de capacitación para jueces y fiscales sobre actos de tortura, y el pago de una indemnización por daños materiales a la víctima.

Paraguay también deberá, en el transcurso de un año a partir de la notificación, proporcionar informes sobre el cumplimiento de la sentencia. La Corte IDH supervisará este proceso y solo cerrará el caso una vez que el Estado haya cumplido totalmente con la condena.

Esta sentencia se produce después de que la Corte Suprema de Justicia de Paraguay ratificara en octubre del año pasado el inicio de un nuevo juicio contra Bower y otros policías por supuestas torturas.

Con su fallo, la Corte IDH no solo busca justicia para López Sosa, sino también cambios estructurales que fortalezcan el sistema judicial y los derechos humanos en Paraguay.

 

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