El barrio de Loma Pytã, ha sido testigo de un creciente problema de inseguridad, lo que ha llevado a la escuela Coronel Felipe Toledo a tomar medidas para proteger a sus estudiantes.
En respuesta a la presencia de adictos en el barrio, la escuela ha decidido adelantar una hora el horario de ingreso de los estudiantes, una decisión tomada con el consenso de la comunidad educativa.
Desde mayo de este año, los estudiantes ahora comienzan las clases a las 12 del medio día. Este cambio no solo tiene el objetivo de garantizar la seguridad de los niños, sino también de permitirles evitar situaciones peligrosas.
“Decidimos hacer este cambio para evitar que nuestros estudiantes estén expuestos a situaciones de inseguridad”, explicó Margaret Cristina Mendoza, directora de la escuela. Además, agregó que la decisión se tomó considerando el horario de invierno y teniendo en cuenta las opiniones de padres, docentes y alumnos.
La escuela ha experimentado el problema de la inseguridad de manera directa. Mendoza compartió una experiencia en la que fueron a buscar a una estudiante y se encontraron con un adicto armado en el camino de regreso. Gracias a la intervención de los vecinos, se pudo capturar a esta persona, que también había asaltado a un familiar de otro estudiante.
A pesar de los desafíos, la escuela ha recibido el apoyo de la comisaría 22a Metropolitana. “Siempre están frente al colegio, y desde ayer nos acompañan a la entrada y la salida”, aseguró la directora.
Los oficiales de la comisaría también se han reunido con la comisión vecinal y las autoridades de la escuela para discutir estrategias de seguridad y patrullaje, aunque reconocen que los recursos son limitados.
En Loma Pytã, la comunidad está trabajando unida para enfrentar los desafíos de la inseguridad.
La anticipación del horario de ingreso en la escuela Coronel Felipe Toledo es solo un ejemplo de las medidas que se están tomando para proteger a los estudiantes y garantizar un entorno seguro para la educación.
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