Plantación de trigo HB4. Foto: Gentileza.
En Paraguay, panaderos, cocineros y diversas organizaciones de la sociedad civil están liderando una campaña contra el trigo transgénico HB4. La campaña busca derogar la resolución del Ministerio de Agricultura que autoriza su uso, alegando que podría tener efectos perjudiciales en la salud humana y el medio ambiente, informa ABC Color.
Se están recolectando firmas en locales gastronómicos y entre la ciudadanía para pedir la derogación de la resolución del Ministerio de Agricultura que autoriza el uso del trigo HB4. Nutricionistas, médicos y organizaciones de la sociedad civil también se han unido a la campaña contra el trigo HB4.
Los críticos sostienen que el modelo de agricultura basado en el trigo HB4 aumenta la desigualdad económica y social, favoreciendo a las multinacionales semilleras en detrimento de los pequeños productores.
El Inbio ha salido en defensa del Trigo HB4 y del uso del glufosinato de amonio. A pesar de las afirmaciones iniciales del ministro de Agricultura y Ganadería, Santiago Bertoni, de que el trigo transgénico no era tolerante a este herbicida, el Inbio ha confirmado que sí lo es.
Según el Inbio, el glufosinato de amonio es un herbicida autorizado y ampliamente utilizado en Paraguay, especialmente en cultivos de maíz. Actualmente, hay nueve variedades de cultivos aprobados que son tolerantes a este herbicida, ocho de los cuales son maíz, según informaron al diario Última Hora.
Inbio, que es socio de Bioceres, la empresa propietaria del trigo transgénico, ha estado defendiendo la seguridad y eficacia de este nuevo cultivo desde su aprobación en mayo.
Además de su tolerancia al glufosinato de amonio, el Inbio destaca la resistencia del Trigo HB4 a la sequía. Este rasgo, proporcionado por un gen del girasol, es un avance significativo para hacer frente a las consecuencias del cambio climático en la agricultura.
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