100 millones de litros ingresan al mes: ¿Cuál es el impacto?
El contrabando de combustible se ha convertido en una crisis de proporciones alarmantes en Paraguay. Según la Asociación de Propietarios y Operarios de Estaciones de Servicios y Afines (APESA), se estima que ingresan ilegalmente al país unos 100 millones de litros de combustible al mes.
“Creemos que los contrabandistas ingresan 100 millones de litros al territorio paraguayo, porque estamos sintiendo una caída en la importación, por el menor consumo en las estaciones de servicio, y los números que manejamos hablan que se redujo en 80 millones de litros en los meses anteriores”, mencionó en una entrevista al canal GEN Miguel Corrales, presidente de APESA.
El contrabando de combustible no solo perjudica a los operadores de estaciones de servicio, sino que también tiene un impacto considerable en la economía local. Corrales señaló que un sector generador de empleo formal está atravesando una situación complicada debido al avance del contrabando, lo que causa un perjuicio significativo a la industria nacional. Además, se necesita un control más riguroso en las fronteras del país, por donde ingresan los distintos productos que luego son vendidos a la vista de todos.
El contrabando de combustible no solo afecta la economía a nivel macro, sino que también tiene repercusiones a nivel micro. Corrales hizo un llamado a la población para que tome conciencia de las consecuencias de recurrir a esta práctica ilegal. No se trata solo de los empresarios que ven sus rendimientos reducidos, sino que también se pone en riesgo cientos de puestos de trabajo de paraguayos que día a día luchan por obtener un salario digno y mejorar su calidad de vida.
Es imperativo que el nuevo gobierno asuma un papel activo en la lucha contra este flagelo, y la esperanza es que este problema pueda ser combatido con mano dura, de acuerdo con las últimas reuniones que se han mantenido con el presidente electo, Santiago Peña.
El contrabando de combustible es una problemática que necesita ser abordada con urgencia. Las repercusiones no solo se limitan a las pérdidas económicas, sino que también afectan la calidad del producto y ponen en riesgo empleos. La solución requiere un esfuerzo conjunto de las autoridades gubernamentales, la industria y los ciudadanos para garantizar un futuro sostenible y próspero para el país.
Más detalles abajo:
Impune: combustible de contrabando liquida al sector formal.
Miguel Corrales, presidente de APESA.
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