Imagen de las máquinas. Foto: Captura.
Los liberados son el suboficial superior Arístides Mereles Paredes, Julio César Espínola Achucarro y Porfirio Yegros Arévalos, quienes se encontraban en el calabozo de la Dirección de Policía del Alto Paraná, tras ser presentados como miembros del grupo que robó las máquinas el martes en la noche en el distrito de Minga Guazú.
Según las declaraciones ante el Ministerio Público de la víctima del robo, el brasileño Bruno Ananco, él mismo pidió a Julio César Espínola Achucarro, propietario de la empresa de seguridad Visión y Éxito, que lo ayude a recuperar los equipos informáticos.
Luego, llamó al suboficial Arístides Mereles Paredes, quien se encontraba libre para ir hasta el kilometro 9 Monday para verificar la localización obtenida a través del GPS.
Al llegar al sitio, la dueña de la vivienda confesó que las máquinas estaban depositadas en el lugar y las entregó, por lo que solicitaron el servicio del fletero Porfirio Yegros Arévalos para el traslado. Pero a 600 metros de la vivienda fueron interceptados por los agentes de Investigaciones, quienes llamativamente se enteraron de la recuperación de los equipos.
“Los agentes de Investigaciones nos trataron como delincuentes, nos esposaron directamente. Nos trataron así porque hicimos el trabajo que ellos debían hacer”, manifestó Julio Espínola y agregó que analizarán con el equipo jurídico qué medidas tomar por el hecho ocurrido, de acuerdo al reporte de ABC.
Los delincuentes se llevaron 180 máquinas durante el atraco y se recuperaron 120 de ellas. Cabe mencionar que en las últimas semanas en el Alto Paraná se registraron numerosos robos de máquinas minadoras y todas con las mismas características que este asalto.
Una banda integrada por al menos 20 personas con vestimenta similar al uniforme del departamento de Investigaciones, con armas largas y cortas, ingresaron a local ubicado en la jurisdicción del kilómetro 14 Minga Guazú, simulando un allanamiento.
Posteriormente, los delincuentes redujeron a los guardias Cristian Prieto Martínez e Isidro Sanabria Vázquez, los despojaron de sus armas y maniataron.
Finalmente metieron al lugar un furgón y cargaron las maquinas generadoras de bitcoins y escaparon del lugar.
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