“Tenemos al frente de Long Bar a personas que realmente no quieren cumplir con las ordenanzas, con las disposiciones legales y es realmente preocupante, se le han hecho todos los controles a estas personas, se le han labrado acta, notificaciones y a pesar de todo el mismo sigue incumpliendo alegremente”, comenzó diciendo.
Manifestó que no se puede individualizar al o los propietarios por que nadie lo acredita. “Es una persona que no quiere someterse a las disposiciones de la municipalidad”, apuntó en conversación con la 730 AM.
“A nosotros lo único que nos consta es que el lugar realmente no cumple con las exigencias (…) y se encuentra en condiciones deplorables”, respondió al ser consultado sobre el video de las ratas.
En cuanto a las diligencias que se están realizando, explicó: “En el expediente de ninguna manera dice que está limpio, dice que no pasa ninguna prueba (…), ninguno de los requisitos que están establecidos por la ordenanza y que debe ser inmediatamente solicitado la medida de urgencia, nosotros no le habilitamos, él está funcionando al margen de la ordenanza, es totalmente informal para el municipio de Asunción, no tiene licencia, no tiene patente, tampoco cumple con la exigencia de salubridad”.
Agregó que se está tramitando la suspensión de las actividades. “Es inminente, se estaría sacando en cualquier momento, la suspensión del funcionamiento, porque no puede seguir abierto”, aseguró.
El escándalo comenzó con un posteo en Instagram en el cual se apuntaba a malas prácticas por parte de Long Bar, local nocturno del Grupo Long.
De acuerdo a la emisora citada, los responsables de Long S.A. y Long Beach S.A. son Jesús María Thompson Samaniego, Juan Andrés López Vargas y Sebastián López Vargas, conocido como Chan.
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