Urbieta fue secuestrado por el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), el 12 de octubre del año 2016. Por ello, sus hijas piden a los captores que se comuniquen con ellos.
Liliana, una de las hijas de Urbieta refirió que tuvieron siete a ocho comunicaciones, y que la última fue en enero del año 2017.
Detalló que en su momento los secuestradores les pidieron un monto determinado de dinero y que no pudieron cumplir, y en esa ocasión incluso acudieron al narcotraficante Jarvis Chimenes Pavão para recibir ayuda monetaria, sin embargo, no lograron completar la suma requerida.
Es por ello, que pidieron una segunda oportunidad a los secuestradores e indicaron que esta vez “no van a fallar”.
“Papá te fallamos una vez, pero si nos dan la oportunidad esta segunda vez n te vamos a fallar papá, confía en Dios, en nosotros que hasta lo imposible vamos a hacer para recuperarte papá”, expresó Liliana Urbieta a los medios de comunicación.