Grupo Cartes envía una “orden” a la Fiscalía en el caso Friedmann

La presión de los medios del Grupo Cartes está subiendo de tono contra Friedmann. En este caso se hace un llamado especial a la Fiscalía para que procese al secretario de Estado, que además es senador con permiso, por denuncias que partieron del conglomerado de Horacio Cartes, o de medios “de la familia”.

La cuestión toma más fuerza con lo que dijo hace unos días el asesor de la Presidencia, Daniel Centurión, quien afirmó que si el secretario de Estado es imputado se tendrá que ir del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).

Friedmann, luego de las denuncias, aseguró que está siendo víctima de una persecución a través de los medios de comunicación de Horacio Cartes.

Lo que encendió nuevamente la llama de las sospechas sobre el secretario de Estado consiste en una delación de un supuesto prestanombres arrepentido, quien asegura que Friedmann en realidad es el dueño de una empresa que se hacía con contratos de la Gobernación en el periodo pasado (durante la presidencia de Cartes), es decir cuando el ahora ministro era titular de la institución.

Incluso se acercaron audios como prueba, a lo que Friedmann asegura que son materiales montados.

Viejo historial

La cuestión es de larga data, comenzó cuando se dio la supuesta renuncia de Friedmann en los primeros meses de 2017.

En aquella oportunidad se había dicho que el documento de la dimisión salió de Mburuvicha Róga, cuando Cartes era el inquilino.

De ahí en más comenzó a orquestarse el juego mediático contra el hoy secretario de Estado. Pero Friedmann tuvo su revancha, ya que fue convocado para jurar como senador en reemplazo del electo Horacio Cartes, quien no podía ingresar al Senado como miembro activo por haber sido Presidente de la República, en ese momento todavía estaba ejerciendo el cargo.

Nuevamente arreciaron las publicaciones en contra de Friedmann, incluso poniendo en juego su sexualidad, tras una publicación del diario Popular, también del Grupo Cartes.

Pero Friedmann no se quedó quieto, encabezó la Comisión Bicameral de Investigación (CBI) del “Caso Messer”, un amigo de Cartes.

Como titular de la CBI, el ahora ministro incluso convocó a Cartes para que declare sobre su “hermano del alma”, cuestión que sencillamente fue rechazada por el empresario, tanto es así que nunca respondió a ningún tipo de consulta.

La CBI envió los antecedentes del trabajo realizado a la Fiscalía, de donde nada más se supo. Es que los legisladores detectaron hechos punibles como el lavado de dinero y la falsificación de documentos. Los legisladores esperaban que la justicia deslinde las responsabilidades de actores como Horacio Cartes, Santiago Peña, Oscar Boidanich y otros en las irregularidades advertidas.

En redes sociales también recordaron los antecedentes de ambos actores políticos.

“Affaire” con el Ministerio Público

Cartes eligió a Quiñónez para que sea titular del Ministerio Público, en una terna que compartía con Javier Díaz Verón y Victoria Acuña.

En la sesión en la que se confirmó a Quiñónez en el Senado, el por entonces senador liberal Miguel Saguier insistió en la intención de Cartes de lograr impunidad a través de la designación de la mujer, de acuerdo a lo consignado por una publicación del diario Última Hora.

Quien no se guarda calificativos contra la Fiscala General del Estado es el periodista Enrique Vargas Peña, quien asegura que es la “empleadita” de Cartes. Justamente esta es la sensación que quedó cuando ningún fiscal intervino en la fiesta de Sol Cartes el 15 de agosto en San Bernardino, donde imágenes revelan que se violaron los protocolos sanitarios vigentes.

El propio ministro del Interior, Euclides Acevedo, dijo a la 730 AM que el Ministerio Público tuvo un desempeño “negligente” en el evento.

Con todo lo dicho anteriormente, no será una novedad que Friedmann termine imputado y fuera del MAG. La mesa está servida, sobre todo con “los antecedentes” que ya fueron publicados por los medios del Grupo Cartes.

Postura

El Presidente de la República Mario Abdo Benítez había mencionado días atrás que los colaboradores que estuvieron bajo sospecha, imputados e investigados, dieron un paso al costado luego de un diálogo.

Evidentemente, es el proceder que debería de repetirse, sean cuales fueran los pactos que se dieron recientemente en esferas del Partido Colorado.

De la misma forma, independientemente a los acuerdos de “cicatrices”, el gobierno no debe dejarse influenciar por Cartes ni ninguna otra figura política, es necesario respetar los debidos procesos, y si la justicia encuentra y comprueba el delito, en ese momento actuar como se hizo en otras oportunidades.

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