El jefe de Estado se refirió en primer momento a su visita a las instalaciones del Instituto de Tecnología Agraria (IPTA) en Canindeyú, en donde se desarrollan semillas de trigo con mayor productividad y resistencia a plagas y condiciones climáticas.
“Esto se está haciendo con talento joven y voy a enviar al Congreso un proyecto de ley para un préstamo aprobado por el BID para fortalecer al IPTA”, añadió. Este préstamo de USD 20 millones servirá para producir recursos humanos capacitados que puedan dar respuesta a las necesidades del campo.
A esto se suma lo que prepara el Ministerio de Agricultura (MAG), con apoyo y coordinación de otras instituciones, para iniciar en setiembre una nueva campaña agrícola y acompañar a unas 220.000 familias de pequeños productores.
En ese contexto, el ministro del MAG, Rodolfo Friedman, indicó que se ha realizado el trabajo participativo con las comunidades y organizaciones locales para el desarrollo territorial e iniciar una campaña agrícola, que se apunta sea una de las mejores de los últimos tiempos.
Citó como ejemplo la campaña del sésamo 2019-2020, que obtuvo una fuerte inversión del Ministerio y pasó de 25.000 hectáreas a producir a 48.000. Esto se tradujo en USD 25 millones que circuló en la región norte del país, donde se concentra esta producción.
Las autoridades instaron en la importancia de incluir al pequeño productor y las familias campesinas dentro de los planes de reactivación.
En la ocasion fueron entregados en el acto central maquinaria agrícola para los Centros de Desarrollo Agropecuario del MAG, que repercute en las familias productoras.
Por otro lado, también se entregaron aportes del Crédito Agrícola de Habilitación (CAH) a pobladores del distrito de Curuguayty, como parte de los créditos blandos que ofrece la institución durante la emergencia sanitaria. En total, en el departamento de Canindeyú, el CAH ha entregado aportes por G. 6.204 millones desde el inicio de la emergencia, en el mes de marzo, reportó IP.
