En Argentina, la cuarentena se extenderá por dos semanas más, es decir hasta el 10 de mayo, pero con condiciones menos estrictas.
De acuerdo, a lo informado por el diario El País de España, los ciudadanos podrán realizar paseos de hasta una hora y los gobernadores provinciales dispondrán de autonomía para decidir qué actividades económicas se reabren, aunque centros educativos y recreativos permanecerán cerrados.
Así mismo, las medidas de confinamiento se reducen en las ciudades de menos de 500.000 habitantes y se permiten salidas “recreativas” de una hora, incluso a los menores.
El anuncio lo realizó el propio presidente argentino Alberto Fernández, en la noche de este sábado, en una conferencia de prensa.
Fernández afirmó que, hasta el momento, las medidas de cautela contra la pandemia estaban funcionando bien.
Señaló que los grandes problemas se concentraban en los grandes núcleos urbanos y conurbanos, como Buenos Aires, Córdoba, Rosario o Mendoza.
En cambio, dos provincias (Catamarca y Formosa) no registraron ni un solo contagio. Esa disparidad aconsejaba, según el presidente, una flexibilización a ritmos desiguales.
El objetivo fundamental expresado por el presidente consistía en permitir una paulatina y controlada vuelta al trabajo sin bajar la guardia sanitaria y manteniendo bajo especial vigilancia las grandes ciudades.
Cabe destacar, que el número de víctimas mortales por Covid-19 en Argentina hasta el sábado, suman 186.
Fernández resaltó que además de contener en un nivel relativamente bajo la cifra de fallecimientos, la cuarentena permitió preparar el sistema sanitario para un probable agravamiento en las próximas semanas.
Fueron adquiridos 700 nuevos respiradores, se incorporaron 11.518 camas hospitalarias y 4.031 nuevos empleados sanitarios y se construyeron doce hospitales modulares, según el mandatario.
