Tapabocas de tela. Foto: El Sol de Cuernavaca (Ilustración).
El ministro de Salud, Julio Mazzoleni, aconsejó usar tapabocas de tela para acudir a lugares con muchas personas como ómnibus, supermercados, farmacias, entre otros.
“Las mascarillas de tela son lavables y permiten una protección razonable con el uso correcto”, indicó el médico en su cuenta de Twitter.
La recomendación es para el público en general sano, así también para los empleados de supermercados, despensas, tiendas comerciales, farmacias, estaciones de servicios y otros servicios indispensables.
Es importante recordar que el empleo de tapabocas no debe reemplazar las medidas de barreras y distanciamiento social, y que tampoco es eficaz si no se realiza el constante lavado de manos con agua y jabón o solución hidroalcohólica.
Los tapabocas que se ajustaban mejor a la parte inferior del rostro y que están hechos de materiales más gruesos, se desempeñan mejor en el bloqueo de partículas que una tela fina.
Tener cuidado de no tocarse los ojos, la nariz ni la boca al quitarse el tapabocas, y desecharlos en bolsas de polietileno bien cerrada y disponerla con los residuos no reciclables. Deben lavarse las manos inmediatamente después de desecharlos.
Si son lavables, colocarlos en una bolsa antes de guardarlos para su posterior lavado.
El tapabocas debe ser lavado después de cada uso, por separado, con en agua muy caliente y jabón. La aplicación adicional de un desinfectante en aerosol capaz de matar microorganismos también puede ayudar.
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