En agosto de 2014, Jhon Jairo Velázquez, alias “Popeye”, recuperó su libertad, tras cumplir 20 años de cárcel. Sin embargo, en mayo de 2018, fue recapturado mientras estaba en una fiesta en Guatapé con Juan Carlos Mesa Vallejo, alias Tom, señalado de ser líder de la “Oficina”’ y jefe de la banda Los Chatas.
Desde ese entonces estuvo recluido en Valledupar, y a finales de 2019, luego conocerse la gravedad de su enfermedad, fue trasladado a Bogotá para recibir cuidados paliativos. En noviembre del mismo año pidieron su libertad por problemas de salud.
Popeye fue conocido por ser el jefe de sicarios del narcotraficante Pablo Escobar. Lideró las acciones delictivas del Cartel de Medellín y estuvo en la cárcel por esos crímenes.
Dos hechos volvieron a dejar su nombre en los expedientes de las autoridades: las amenazas al excandidato presidencial Gustavo Petro, en Colombia y las extorsiones que cobró, tras salir de la cárcel en 2014.
El Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) confirmó que desde el 31 de diciembre del año pasado se encontraba hospitalizado. Estaba acusado de los delitos de concierto para delinquir y extorsión, según informó el portal digital de noticias El Colombiano.
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