Tomar alcohol es un hábito muy común en Paraguay; la cerveza, el vino, el whisky y otras bebidas, son las preferidas a la hora de brindar y “darse un gusto” después del trabajo o los fines de semana.
Sin embargo, existe información poco conocida acerca de estos tragos tan solicitados: si se consumen en exceso son riesgosos para la salud, pero tomar moderadamente también trae interesantes beneficios.
El Lic. en Nutrición Antonio Danei, explicó que las bebidas alcohólicas no deben ser consumidas por aquellas personas que padecen enfermedades patológicas que comprometen órganos como el hígado, el riñón o el corazón. Además, hizo hincapié en aquellos pacientes con diabetes, ya que los mismos también deben evitar tomar alcohol por su condición.
“La persona que está saludable y se cuida, lógicamente sí puede darse el privilegio de brindar de vez en cuando, sin excederse también con los tragos”, manifestó en el programa Ensiestados de ABC TV.
El Lic. Danei comentó que las bebidas alcohólicas aportan una gran cantidad de calorías, incluso más que los alimentos ricos en carbohidratos o proteínas.
“El alcohol aporta más calorías que los carbohidratos y las proteínas: un gramo de alcohol tiene 7 calorías, mientras que un gramo de carbohidratos o de proteínas tiene 4. La que gana en este caso es la grasa, que tiene 9 calorías por cada gramo”, explicó.
La graduación alcohólica varía de acuerdo al tipo de bebida, manifestó el nutricionista. “Cuando hablamos de bebidas fermentadas como la cerveza, la sidra, el champagne, el vino espumante o el vino, hay menos calorías”, informó Danei.
“Pero cuando hablamos de bebidas destiladas como la caña, el whisky, el vodka, el tequila o el ron, tienen más calorías porque tienen mayor contenido de alcohol”, agregó.
El profesional de la salud manifestó que las bebidas dulces se convierten en “un arma de doble filo” al mezclar alcohol con azúcar o frutas.
“Uno medio que no siente lo que está tomando, porque el alcohol va mezclado con azúcar, frutas, etc. Entonces se va tomando de más. Con el alcohol y el azúcar, hay más calorías que si se tomara la bebida sola”, detalló.
Aunque es una de las bebidas que menos calorías aporta al cuerpo, la cerveza se consume en grandes cantidades en Paraguay; es por eso que las personas comienzan a notar sobrepeso a causa de su consumo excesivo.
“La cerveza ‘hincha’ porque se toma en mayor cantidad. Hay que tener en cuenta que un pack de seis latitas son casi dos litros”, dijo Danei.
El nutricionista recomendó tomar lentamente para ‘dar tiempo’ al organismo de que procese la bebida. “El cuerpo humano está preparado para procesar un vaso de cerveza por hora, por eso hay que tener mucho cuidado. En algunas personas es más rápido y en otras más lento”, informó.
El Lic. Danei también se refirió a la costumbre que tienen muchas personas de mezclar bebidas destiladas con energizantes. Al respecto, dijo que esta combinación “es una bomba de tiempo”, pues acelera al corazón y puede traer consecuencias fatales.
Por otro lado, manifestó que las famosas pastillas para “yerar” sólo actúan sobre los efectos colaterales del consumo excesivo, pero no eliminan el alcohol del torrente sanguíneo.
Otro mito muy difundido es del tomar agua para “frenar” los efectos del alcohol; sin embargo, el Lic. Danei afirma que este truco no sirve para minimizar los efectos de las bebidas en el cuerpo.
“El alcohol es una de las sustancias que más rápido pasa al torrente sanguíneo, como el agua y la aspirina. Y si uno está con el estómago vacío, toma uno o dos tragos y ya le marea, porque sube rápidamente al cerebro y eso tiene una permanencia dentro del cuerpo humano”, explicó.
El experto acotó que el alcohol tiene un efecto diurético y se va desechando progresivamente a través de la orina.
Pero no todos son riesgos y peligros con las bebidas alcohólicas. Su consumo moderado también puede traer beneficios, como en el caso del vino. “El vino tinto evita la oxidación de las células, hace que no descompongan nuestros tejidos, es anti age”, señaló Danei.
“La Asociación Americana del Corazón habla de que se puede consumir de manera alternada, día de por medio, una copita o dos. En el caso de los varones puede ser una copita más que las mujeres”, detalló.
Agregó además que esta bebida se debe acompañar con las comidas “para que se aprovechen esas sustancias favorables a la salud”.
El Lic. Danei comentó que existen varios órganos dentro del cuerpo humano que se ven afectados de manera directa con el consumo excesivo de alcohol.
Los tragos favoritos de los paraguayos varían mucho en cuanto a la cantidad de calorías: mientras que algunos no superan las 50 Cal por 100 ml, otros llegan casi a 300 en la misma cantidad.
Es así que por cada 100 ml, la cerveza aporta 43 Cal, la sidra 49 Cal, el champagne 75 Cal, y el vino 85 Cal.
Las bebidas destiladas, al tener mayor graduación alcohólica, aumentan la cantidad de calorías por 100 ml. El tequila tiene 110 Cal, el vodka 230 Cal, la caña paraguaya 230 Cal, el whisky 250 Cal, y la caipirinha (mezcla de cachaça, azúcar y limón) tiene 263 Cal.
Esta web usa cookies.