El 15 de agosto de 1537, Juan de Salazar de Espinosa fundaba el fuerte llamado Nuestra Señora de la Asunción. Hoy en día es la capital de Paraguay y la ciudad más importante del país.
La fisonomía de la capital tiene cuestiones características que se ven a diario, algunas buenas y bellas, otras no tanto.
El Palacio de los López es una de las postales más características del país. El nombre corpóreo de la ciudad le da más vida de la que ya tenía.
Es otro punto tradicional, otrora sitio de festejos de diversas índoles.
Es algo nuevo, pero no menos emblemático por el cambio que representa.
Entre lo destacable, pero en lo malo de la capital.
Los damnificados por la crecida conforman el panorama de una ciudad y un país que sigue generando excluidos.
Los baches son una constante en las calles de la capital, desde hace décadas.
El lapacho, un verdadero orgullo para cualquier paraguayo.
El peatón, en zonas, no es gente a juzgar por las veredas.
La calle Palma se erige como un punto central del microcentro capitalino.
La pobreza en los bañados es algo que la ciudad no puede esconder.
Esta web usa cookies.