La tormenta política que se generó tras el acuerdo secreto firmado en Itaupú, parecía llegar a fin luego de que el presidente de la República hiciera “rodar cabezas” en la cúpula de su Gobierno. Varios de sus más leales correligionarios, entre ellos el excanciller Luis Castiglioni, pusieron sus cargos a disposición y así pretendían salvaguardar la imagen del jefe de Estado ante la opinión pública.
Sin embargo, una serie de mensajes entre el mandatario y extitular de la ANDE, Pedro Ferreira, arroja nuevas dudas sobre este pacto que estuvo a punto ser una realidad y dejaba en notable desventaja al Paraguay. Fue el mismo Abdo Benítez quien, en conversación con la prensa, salió a aclarar esta polémica conversación.