De acuerdo a los informes, los malvivientes desactivaron las cámaras del circuito cerrado y borraron todo lo registrado en el disco duro del sistema de vigilancia.
También se llevaron todas las joyas, relojes y otros artículos que se encontraban en la vidriera, pero no consiguieron abrir la caja fuerte.
El propietario, Guido Galli, manifestó que robaron todo lo que estaba en vidriera, “todo lo que encontraron”.
“El fruto de años de nuestro trabajo. Es la cuarta vez que nos pasa esto”, lamentó.
Galli presume que las personas con conocimiento del movimiento del local serían quienes perpetraron el delito, según indica ABC Color.
Mientras trabajan en cuantificar el total de la pérdida registrada que según los primeros cálculos del dueño, es de G. 500 millones.