La Corte IDH dio a conocer hoy su sentencia en el caso “Arrom Suhurt y otros” contra el Estado paraguayo, en la que declara por unanimidad que el Estado no es responsable de las supuestas violaciones a los derechos humanos que motivó la denuncia ante la instancia internacional, de acuerdo a lo informado por la agencia estatal IP.
Tanto Arrom como Martí pedían sumas exorbitantes al Estado paraguayo, por supuestas torturas que sufrieron.
Juan Arrom y Anuncio Martí están procesados por la justicia paraguaya debido a que son sospechosos de ser responsables del secuestro de María Edith Bordón de Debernardi.
La mujer fue tomada el 16 de noviembre de 2001. Estuvo 64 días en cautiverio, hasta su liberación, el 19 de enero de 2002.
En aquella oportunidad, los demandantes formaban parte del Partido Patria Libre, ala política de lo que hoy se conoce como el autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
Ambos denunciaron que fueron detenidos y torturados por policías, incluso el momento en que lograron liberarse ya había medios de prensa esperando.
Ambos pidieron asilo político en el Brasil, cuando comenzaron a ser requeridos por la justicia paraguaya.
Ya estando en el país vecino, demandaron al país ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que recomendó condenar a Paraguay para resarcir a los supuestos afectados.
A finales de 2018 se conoció la información de que la CIDH recomendaba condenar al Estado paraguayo.
El mecanismo de defensa del Estado se activó y se llegó a los alegados ante la Corte IDH en febrero de este año, en Costa Rica.
El Presidente de la República Mario Abdo Benítez viajó hasta el país centroamericano y estudo presente en la jornada.
Arrom fue quien habló durante la sesión, en uno de los puntos más llamativos afirmó que “no valió la pena” denunciar a nivel local la supuesta tortura a la que fue sometido.
Martí prefirió no hacer intervención alguna.
En ese momento, Arrom dijo que pedía de manera simbólica USD 50 millones. La cifra definitiva fue de USD 123 millones.
El médico forense Pablo Lemir había visitado programa Algo Anda Mal (AAM) y dejó en evidencia las inconsistencias en las lesiones que supuestamente fueron provocadas por las torturas.
Uno de los primeros puntos señalados consiste en que la barba de ambos hombres no presentaba mayores daños, a pesar de que mencionaron que estaban con la boca tapada con cinta de embalar.
En el caso de Arrom, indicó que no tenía los moretones que declaró, de acuerdo a lo que llegó a cotejar mediante imágenes de TV que son conocidas de cuando fueron “liberados”.
En el caso de Martí, no contaba con un golpe fuerte en la cabeza, que según sus palabras le provocó un sangrado. Se encontró apenas una escoriación en su frente, dijo Lemir.
Lemir aseguró que hay “inconsistencias grandes” con relación al relato de los procesados y los hallazgos.
“Al no haberse establecido la responsabilidad internacional del Estado, no procede pronunciarse sobre reparaciones, costas y gastos”, indica la parte resolutiva de la sentencia firmada por el presidente de la Corte IDH, Eduardo Ferrer Mac-Gregor Poisot, y demás magistrados que atendieron el caso.
En la sentencia, la Corte advierte que los indicios presentados son insuficientes para inferir la conclusión de que Arrom y Martí fueron privados de libertad por parte de agentes estatales o con la aquiescencia de éstos por lo que conlcuye que el Estado no es responsable de la violación de los artículos 3, 4, 5 y 7 de la Convención Interamericana de Derechos Humanos.
Igualmente concluye que el Estado no incumplió con su obligación de iniciar de oficial la investigación del caso denunciado y que igualmente llevó a cabo la investigación con la debida diligencia. Por estas razones, la Corte concluye que el Estado no es tampoco responsable de los artículos de la Convención referidos a la desaparición forzada y la prevención de la tortura.
Con esta sentencia, el caso que llevó al Estado paraguayo ante la CIDH en febrero pasado queda archivado, informó la agencia IP.
María Edith Bordón de Debernardi conversó con Radio 1000 AM y expresó: “Para mí llegó la justicia divina que tanto esperábamos, realmente se hizo justicia”.
Agradeció a Mario Abdo Benítez, y a todos sus colaboradores. “porque realmente defendieron la patria”. “Se hizo justicia para el país”, insistió.
María Edith recordó todos los estragos que vivieron tanto ella como su familia durante su cautiverio y expresó que nadie merece atravesar por esa situación.
“Nos acordamos tanto de Antonio (su esposo fallecido), yo pienso que él ha de estar feliz con todo lo que luchó por la justicia siempre, por todo este caso nuestro que realmente le llevó a él eso, a él nadie le paraba, era una persona que siempre luchaba por la justicia”, atizó.
Ante el fallo, el Estado no demandará el pago de las costas por parte de Arrom y Martí.
“Podemos reclamar las costas del juicio, pero no está en el espíritu del Estado recurrir a eso”, fue lo que manifestó el procurador general de la República, Sergio Coscia, a Radio 1000 AM.
Por otro lado, se sabe que el Estado paraguayo ya había pedido que se revoque el estatus de refudiados de los demandantes, para ser sometidos a la justicia paraguaya.
El Canciller Nacional, Luis Castiglioni, conversó con la 730 AM y aseguró que se dio un fallo histórico, ya que de 250 sentencias, solo en una o en dos se favoreció a los Estados demandados.
El mismo Castiglioni el 31 de diciembre del año pasado había afirmado que las decisiones de la Corte IDH se daban debido a la “ideologización” de las Organizaciones No Gubernamentales (ONGs). Dio a entender que el ente se somete a una “alineación ideológica” para emitir sus fallos.
“Gran triunfo del Paraguay! La Corte Interamericana de Derechos Humanos rechazó plenamente la demanda de Arrom y Martí, y no se les pagará #NiUnDolar. Celebramos la victoria en esta causa nacional que nos unió a todos los paraguayos”, fue lo que tuiteó el mandatario.
Sobre lo que sintió en la intimidad, Castiglioni contó a la emisora citada que el presidente estaba contento por la decisión y por la unión que se dio por “una causa justa”
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