El letrado mencionó a RDN que el síndico cuenta con denuncias por desacato, es decir, por incumplimiento de resoluciones judiciales, también por enriquecimiento ilícito, ya que tiene un patrimonio que no puede justificar y lavado de dinero, aseguró.
Detalló que Couchonnal Zeiser tiene varias denuncias en su contra y que incluso en el pasado la Corte Suprema de Justicia lo suspendió en el cargo, hasta que le fue revocada la suspensión.
“Tuvo un mal andar, durante su carrera como síndico, no respetando nada de las quiebras que manejo” refirió.
Guerrín manifestó que el denunciado quiere ser reelecto de vuelta en su cargo, decisión que se trataría el martes 28 de mayo o el próximo martes 4 de junio. Forman parte de la terna Bernardino Caballero y Sira Green.
Destacó que una persona con esos antecedentes no puede seguir trabajando dentro de la quiebra y mucho menos como funcionario del Poder Judicial.
Explicó que la denuncia penal planteada ante el Ministerio Público y que radica en la unidad de la fiscala Esmilda Álvarez, fue realizada por María Jobeli Melgarejo, quien supuestamente se vio afectada por el mal desempeño del agente síndico Couchonnal Zeiser, luego de un intento de compra de una propiedad por parte de la mujer en la quiebra del Banco Unión.
Detalló que la mujer realizó un depósito y que nunca se materializó la transferencia, por ello se emprendió un proceso judicial y se resolvió que la quiebra debía devolver el dinero en intereses.
Díaz Guerrín mencionó que le entregaron parte del dinero a la mujer, pero que la totalidad es de G. 2.100 millones.
Pese a que en tres instancias existe una resolución en la que el síndico debe devolverle una suma de dinero a la denunciante, Couchonnal Zeiser se niega a hacerlo.
“No saben si es un capricho o si gasto todo el dinero de la quiebra”, puntualizó.
