No es un descubrimiento que Paraguay tiene una infraestructura deficiente, por lo que Asunción no puede ser una excepción, sin embargo el estado de la capital es cada vez más calamitoso.
En algunos casos es problema de la Municipalidad de Asunción, mientras que en otros el inconveniente atañe a otras instituciones del Estado.
Pase a la siguiente página y lea los detalles.
La basura es uno de los problemas más visibles de la capital. No es un inconveniente solo de gestión, también es cultural, ya que muchos de los habitantes de la urbe tiran sus desechos a la calle ante la primera llovizna.
En este caso es un problema estructural, Asunción no cuenta con desagüe pluvial en toda su extensión, esto hace que las calles se conviertan en verdaderos ríos, poniendo en peligro la vida de conductores y peatones.
Los baches desde antaño vienen proliferando en las principales calles de la capital. No es una cuestión que se genera solo por una mala administración de la comuna, también deviene de los problemas de la Essap y de la falta de desagüe pluvial.
En este sentido hay un cúmulo de responsabilidades, ya que el tránsito se vuelve pesado no solo por la falta de infraestructura, también por la mala calidad del transporte, la mala señalización, el mal estado de las arterias, la deficiente red de semáforos, entre otros factores.
En estos días se vio un caso en el que un motociclista murió debido al desperfecto de un semáforo. Que un aparato de señalización no funcione en la capital no es novedad.
Los carteles de pare, las lomadas mal pintadas, y otras deficientes señalizaciones hacen que circular sea todo un desafío.
La falta de espacios para estacionar sin tener que ser prácticamente extorsionado por un cuidacoches es otro escollo para una vida tranquila en la capital.
Asunción no fue capaz de generar incentivos para acceder a lugares para aparcar sin un costo excesivo, mucho menos para adaptar espacios ya existentes.
Los buses que dependen de la Municipalidad de Asunción son de los peores del país. Se suman los que están bajo la administración del Viceministerio de Transporte y que se trasladan desde otros municipios.
Este es un factor que influye en el caótico tránsito que se tiene en la capital y en los alrededores, cualquiera, a la primera oportunidad, se compra un vehículo usado o una moto.
La contaminación que sufre los cauces hídricos es alarmante. Todo ese caudal de basura proviene de la ciudad, ya que es transportado por los raudales.
La muestra de ello es el arroyo Mburicaó, que está atestado de residuos de todo tipo y va a parar al río Paraguay.
La situación de las plazas y otros espacios públicos también es deprimente. Hoy en día, las plazas que están en el microcentro están ocupadas por los damnificados por la crecida.
Pero no se trata solo de la crecida, normalmente algún que otro espacio público es ocupado ya sea por indígenas, campesinos, y otros grupos. Si bien en muchos casos el problema es estructural, termina afectando la imagen de la capital del país.
No es necesario ser un conocedor de la realidad socioeconómica del país para saber que Asunción tiene lugares en que la inseguridad es palpable.
El microcentro muchas veces es noticia por hechos bagatelarios y hasta grandes robos. Nadie se salva, ya que hasta importantes sucursales de bancos en sitios al parecer seguros son abordados por delincuentes.
Esta web usa cookies.