En comunicación con AAM Radio, de radio 1000 AM, Alberto Medina contó que en octubre del año pasado presentó una denuncia ante la CIDH, contra el Estado paraguayo.
De acuerdo a su relato, su hijo Anderson Medina fue víctima de un “gatillo fácil” y sufrió un daño en la columna que lo llevó a realizarse varios tratamientos sumamente costosos, y en ningún momento recibió ayuda de las autoridades nacionales.
Medina resaltó que intentó comunicarse con el ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, pero este, ni lo quiso recibir, por lo que fue hasta la CIDH y presentó la denuncia.
“Antes de presentar la denuncia ante la CIDH yo quería conversar con él para llegar a un arreglo amistoso pero no me quiso escuchar, me mentía, yo no quería llegar a esta instancia”, declaró.
Destacó que los insumos, la internación hospitalaria y los medicamentos, le costó hasta el momento alrededor de G. 1.000 millones, sin recibir ayuda de parte del Estado.
Anderson Medina fue víctima de un disparo que le dañó la columna en el 2012, la misma fue efectuada por Narciso Cañete. El joven quedó con graves secuelas de por vida.
Cañete, por su parte, fue condenado en dos instancias, pero no se sometía a la prisión preventiva. Recién desde 2017 que el oficial guarda reclusión en la Agrupación Especializada, condenado a siete años de cárcel.
