“Estoy pasando un momento muy difícil”, comenzó diciendo el diputado imputado por tráfico de influencias, asociación criminal, enriquecimiento ilícito, lavado de dinero y tráfico de drogas en carácter de cómplice.
El legislador está procesado por supuestos vínculos con “Cucho”, quien a su vez es sindicado como jefe narco del este.
Negó los hechos punibles que se le imputan y que la Fiscalía actúa con saña y parcialidad manifiesta.
Sobre sus bienes, dijo a la 730 AM que no tiene ni casa propia, pero reconoció que compró 18 lotes en Hernandarias, en el departamento de Alto Paraná, por valor de G. 207 millones.
La versión brindada señala que formó parte de sus honorarios percibidos como abogado.
En cuanto a la comunicación, que es usada por la Fiscalía para vincularlo con “Cucho”, manifestó que efectivamente conversó con Cabaña y que incluso llamó a la comisaría en la que se encontraba el emisario de supuesto jefe narco.
Finalmente, aseguró que no llegó a “ayudar” al presunto jefe del grupo criminal, a pesar de haber conversado con un asistente fiscal para que acuda hasta la comisaría en cuestión.
La llamada
Según la Fiscalía, mediante una orden judicial, se interceptó la comunicación entre Quintana y Cabaña, el 28 de agosto cuando el secretario de este último fue retenido en una comisaría del departamento de Caaguazú.
El hombre tenía en su poder unos USD 190 mil, según el acta policial se trataba de solo USD 19 mil.
Según las pesquisas, el secretario de “Cucho” fue liberado luego de algún tipo de pago a los uniformados.
Los detalles en el audio.
