Según informes de la Fiscalía, la representante del Ministerio Público pidió al Juzgado de la Niñez y la Adolescencia la internación de la procesada en un Centro Educativo.
El hecho se registró en la compañía Cerrito, de San Juan Nepomuceno, departamento de Caazapá.
La imputada tuvo una discusión con su pareja, tras lo acontecido, arrojó a su hijo de cinco meses al fuego, según los datos.
Los familiares rescataron al pequeño y lo llevaron al hospital de la zona, posteriormente fue remitido al Hospital del Quemado.
El bebé debió ser sometido a diversas operaciones que inclusive derivaron en la amputación de dedos del pie.
La Fiscalía requirió que la madre, menor de edad, sea llamada a declarar ante el juez y solicitó unas evaluaciones de tipo psicosocial y socioambiental.