El “Mago” no pensó en jugar en serio al fútbol hasta que cobró su primer premio

Este viernes el 10 cumplió 48 años y conversó con la 730 AM. El Mago se caracterizó en su carrera por hablar poco con la prensa.

Antes de ir a sus declaraciones es bueno recordar quién fue el talentoso número 10 de Cerro Porteño, Sport Colombia, además de otros equipos a nivel local como Olimpia y Libertad.

Alvarenga comenzó en el club fernandino, donde según él solo iba a divertirse. Luego pasó al Mandiyú de Corrientes, Argentina, donde en 1994 fue dirigido por Diego Armando Maradona, por entonces suspendido por dar positivo al control antidoping en Estados Unidos 1994.

Recordó que Maradona, ya que todavía era “jugador”, practicaba a menudo con el plantel del club correntino.

“Él jugaba así los dos toques y eso y te hacía sentir que nosotros éramos inútiles, un genio era, le vi hacer cosas que en otro lado nunca vi, increíble era”, rememoró sobre el argentino, considerado como uno de los mejores jugadores de la historia.

En el 95 pasó a Banfield, también de la Argentina y luego fue a Perú, en 1997.

Finalmente volvió al país para fichar por Cerro Porteño, club con el que está más identificado por la gente, según afirmó.

Luego de dos temporadas, tuvo una experiencia en Japón, en 2000, para luego volver a brillar en Barrio Obrero, en 2001, siendo campeón a nivel local.

Ese mismo año marcó uno de los goles más importantes y recordados de su carrera, el 0-1 de Paraguay contra Uruguay en el Centenario de Montevideo por las Eliminatorias, rumbo a Corea y Japón de 2002. Justamente ese mundial fue el que jugó el Mago, bajo las órdenes del italiano Cesare Maldini.

En el año del mundial estuvo militando en el León, de Mexico.

A finales de 2002 volvió a Paraguay y recaló sorpresivamente en Olimpia, archirrival del club en el que fue máximo ídolo.

Recordó el primer clásico que le tocó jugar con la franja negra del Decano. Rememoró que la hinchada de Cerro le pedía que salude y que él no supo qué hacer en ese momento. En aquel entonces fue una cuestión nunca antes vista.

No dejó de hablar de los clásicos rivales y aseguró que en ambos clubes “pasó muy bien”. No brindó muchos detalles acerca de cómo fue a parar a Para Uno asegurando que en ese momento todo fue manejado por su representante.

Luego de vestir la camiseta del Decano llegó a jugar en Libertad y terminó su carrera donde había comenzado, en el Sport Colombia.

Cómo comenzó

El Mago recordó que fue convocado para jugar en la primera de Sport Colombia y que en el primer partido habían perdido, por lo que al parecer todo pasó desapercibido.

El segundo duelo que disputó lo ganaron y días después, Alfonso Colmán, titular del club, apareció por la institución, recordó. En aquel momento no sabía de qué se trataba hasta que se dio cuenta que era para pagar los premios.

“Lo que estaba cobrando de premio era el doble del sueldo que yo estaba ganando”, dijo indicando que en el aquel entonces vendía agua en un carrito estirado por un caballo.

“Me pagaron el premio y ahí ya fue otra cosa, ahí empecé, ahí me dediqué 100%”, atizó, agregando que hasta ese instante había tomado el fútbol como una “joda”.

Lo que es el fútbol para él

Brindó un consejo para quienes desean dedicarse al fútbol, mencionó que las oportunidades se deben de aprovechar. Se puso como ejemplo e indicó que él dormía en el suelo y que quiso cambiar su realidad, por lo que se dedicó de lleno a la actividad que él tomaba como un trabajo.

Con relación a sus gustos, sostuvo que el fútbol inglés es el mejor ya que es “sencillo y juegan como se tiene que jugar, con la pelota al ras del piso”.

También fue consultado sobre su preferencia entre Lionel Messi y Cristiano Ronaldo. No dudó en responder “el fútbol es Messi”, reconociendo que el portugués tiene lo suyo.

Los detalles en los audios de abajo:

El Mago con la 730 AM primera parte.

El Mago con la 730 AM segunda parte.

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