La mujer manifestó que el hombre estaba muy enojado porque perdió su club en el clásico.
La misma explicó que el oficial llegó muy nervioso hasta la casa donde residen tanto la niña como la madre.
Indicó además que el hombre arremetió primero contra ella por lo que debió acudir hasta un centro asistencial, dejando a la pequeña sola en la casa.
En ese lapso el uniformado habría golpeado brutalmente a la víctima.
El fiscal de la causa indicó que la vida de la misma corrió serios peligros, incluso estuvo a punto de morir.
«Los golpes ocasionaron que la niña vomitara sangre«, señaló.
En tanto que el oficial acusado del hecho fue identificado como Roberto Caballero, quien fue enviado al juzgado para imposición de medidas.
Por otra parte el Ministerio Público solicitó prisión inmediata para el agente.