Rojas indicó que como consecuencia del aumento del gasoil también vendrá el aumento de todos los artículos de primera necesidad y golpeará sin piedad los ingresos de los trabajadores.
“La medida ocasionará más miseria para los sectores carenciados y abultará la castigada canasta familiar”, señaló.
El presidente de la Central detalló que para hacer frente al golpe dado por el Gobierno tienen sus propuestas.
Los trabajadores solicitan “el inmediato y urgente reajuste salarial del 30% para todos los trabajadores públicos y privados que sería G. 2.600.000. Así como la suspensión de la aplicación de la medida hasta la asunción del nuevo Gobierno y la instalación de una mesa de diálogo con el nuevo Gobierno y los empresarios a fin de consensuar una nueva política económica que satisfaga las necesidades del pueblo”, puntualizó.
«Pero lo ideal sería que el salario mínimo llegue a G. 2.900.000 para que básicamente ayude al trabajador», expresó.
Así también remarcó que los trabajadores deben movilizarse para hacer escuchar la voz al Gobierno, para un inmediato reajuste salarial y unas mejores condiciones de trabajo y de vida.
“Condenamos la situación económica de pobreza, desempleo, corrupción e impunidad a la que nos somete este impopular Gobierno”, finalizó.