Agosto de 2016. Un hombre de ascendencia libanesa es detenido en el Aeropuerto Guaraní, de Ciudad del Este -en la zona conocida como la Triple Frontera entre Paraguay, Brasil y Argentina-, mientras intentaba enviar 39 kilos de cocaína escondidos en rollos de papel film. El destino final de la carga era Turquía.
Febrero de 2017. Dos ciudadanos turcos son detenidos mientras preparaban una carga de cocaína líquida que debía ser transportada escondida en botellas de shampoo. Ambos, vinculados al primer cargamento.
Los tres detenidos fueron identificados como Alí Issa Chamas, paraguayo de ascendencia libanesa; y los ciudadanos turcos Munir Ozturk (48) y Eray Uc (29). Chamas fue extraditado poco después a Estados Unidos, donde fue condenado la semana pasada por narcotráfico.
Dos días después, sus cómplices Ozturk y Uc consiguieron escaparse de la custodia de guardias penitenciarios, aprovechando una salida que habían conseguido con la excusa de someterse a análisis médicos.
Un manto de dudas todavía cubre al caso. Apenas unos días antes, ambos habían sido trasladados desde la Penitenciaría de Ciudad del Este hasta la Penitenciaría Regional de Misiones, un departamento ubicado en la zona sur del Paraguay y limítrofe con la Argentina, luego de que la jueza Alba Meza -magistrada bastante cuestionada por actuaciones en otros casos- ordenara el cambio.
Ozturk y Uc fueron llevados el viernes hasta Encarnación para someterse a estudios médicos. Sin embargo, mientras se encontraban en la capital del departamento de Itapúa -limítrofe también con Argentina- ambos ciudadanos turcos consiguieron escabullirse de los guardias que los habían acompañado y se dieron a la fuga.
Como consecuencia, el director de la penitenciaría regional fue destituido e imputado; al igual que dos guardias penitenciarios.
Vinculados con financiamiento terrorista
De acuerdo a fuentes estadounidenses a las que tuvieron acceso los equipos periodísticos de AAM y RDN, tanto Chamas como Ozturk y Uc forman parte de una red gigantesca de tráfico de drogas que opera a nivel mundial y financia a grupos terroristas de Medio Oriente.
Durante el juicio en Estados Unidos, Chamas confesó a las autoridades del país norteamericano que la droga que intentó enviar desde Paraguay en agosto de 2016 tenía como destino final Turquía, donde debía ser distribuido por miembros del Hezbolláh, un partido político libanés cuya ala más radical es vinculada al terrorismo.
Imágenes del teléfono de Chamas captadas el día de su detención y las que tuvieron acceso nuestros equipos periodísticos revelan que se comunicaba de forma constante con Ozturk, incluso poco antes de ser arrestado por las fuerzas de seguridad de Paraguay.
“Documentos migratorios, materiales incautados por las fuerzas del orden y los contactos dentro y fuera de la Triple Frontera revelan el carácter global de la red de la que forman parte Chamas, Ozturk y Uc”, señaló una fuente estadounidense consultada por nuestros equipos periodísticos.
Durante los allanamientos realizados tras la detención de los tres, las fuerzas del orden encontraron en el departamento de Ozturk documentos de identidad de Sehmus Soytas, un residente de Lice (Turquía), quien fue detenido en 2001 por sospechas de traficar heroína hasta Irán.
Además, los pasaportes de Chamas, Ozturk y Uc demuestran que realizaban constantes viajes a países como Colombia y Perú, conocidos como dos de los mayores productores mundiales de cocaína. Además realizaron varios viajes a Argentina, considerado país de paso de la droga rumbo a Europa, África y Asia.
Incluso, los pasaportes revelan varios a Irán y Chipre, países donde el ala terrorista de Hezbolláh tiene fuerte presencia.
De cocaína a cigarrillos
No es la primera vez que se vincula a Paraguay con el financiamiento terrorista. Y tampoco es la primera vez que se menciona la presencia de Hezbolláh en nuestro territorio. De hecho, se llegó a hablar incluso de un negocio del presidente de la República, Horacio Cartes, que estaría envuelto en la cuestión.
Un informe presentado en mayo pasado ante el senado norteamericano puso a Paraguay como un punto clave para el paso del dinero desde este lado del globo hacia grupos terroristas de medio oriente.
El informe fue presentado por el Dr. Emanuele Ottolenghi, de la Fundación para la Defensa de la Democracia. El documento afirma que las redes del terrorismo islámico están expandiendo su influencia a lo largo del hemisferio occidental mediante una creciente cooperación con el crimen organizado, “a menudo con la asistencia de élites políticas corruptas”.
Textualmente, el informe indicaba que “Paraguay es considerado la principal fuente del comercio ilegal de cigarrillos en el hemisferio occidental. La mayor parte de su producción anual de 68.000 millones de cigarrillos es exportada ilegalmente, con solamente un 3% consumido en el mercado doméstico. De acuerdo con algunas estimaciones, tiene una participación del 10% en el comercio ilegal en el mundo”.
Es allí donde aparece el nombre del presidente de la República, Horacio Cartes. Cartes es propietario de Tabesa, la mayor tabacalera del país y señalada en diversas oportunidades como la gran responsable del comercio ilícito de tabaco en la región.
De acuerdo a datos de organizaciones internacionales, el contrabando de cigarrillos mueve anualmente unos 500.000 millones de dólares.
El informe habla de crecientes indicios de que el Hezbollah participa en el contrabando de cigarrillos de Paraguay a Brasil en sociedad con el Primeiro Comando da Capital (PCC), aprovechando “la impunidad que gozan en un país donde el principal productor es también el Presidente de turno”.
No es la primera vez que se habla de Cartes y el contrabando de cigarrillos. En un informe anterior se hablaba de los vínculos de empresarios cercanos al grupo terrorista con el diputado y aspirante a la vicepresidencia de la República por el Partido Colorado, Hugo Velázquez.
Y todavía queda mucho por contar.
[email protected] – @juankilezcano
Próxima entrega: Vínculos hasta con involucrados en el ataque a la AMIA.