Los condenados a 30 años de prisión, más 10 años de medida de seguridad, son Gissella Eliana Millen Otto e Isaías Raúl Torres.
De acuerdo a lo informado por Telefuturo, ambos se echaron la culpa, por esto el pedido de perdón durante el juicio oral no fue considerado.
El joven fue encontrado sin vida en su domicilio en febrero de 2014. Acusó un fuerte golpe en la cabeza, factor que habría desencadenado en su muerte.
Inicialmente, Baranda fue vinculada con el crimen, sin embargo esto luego fue descartado.
La presidenta del tribunal de sentencia dijo que se otorgaban las medidas de seguridad debido a que se considera a los condenados como peligrosos para la sociedad.
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