Un niño de 8 años sufrió quemaduras de tercer grado y se encuentra en estado delicado.
El padre estaba presuntamente bajo los efectos del alcohol cuando derramó el querosén y prendió fuego a las piernitas del pequeño.
Al percatarse de lo acontecido, después de unos días, los familiares lo auxiliaron, y lo trasladaron hasta el Hospital Pediátrico Acosta Ñu, para luego ser derivado al Hospital del Quemado.
En tanto que la Fiscalía analiza la situación del padre ya que la madre fue liberada porque posiblemente sufre de problemas mentales.
Los parientes quienes quedaron con el niño, solicitan apoyo de la ciudadanía, por la condición humilde del niño, según informó NoticiasPy.