Medios internacionales reportan que los jóvenes llegaron hasta un centro asistencial de Marruecos con los mismos síntomas. Ninguno de ellos presentaba rastros de haber sido mordidos por algún animal.
Luego confesaron haber mantenido relaciones sexuales con el animal sin saber que estaba infectado con la enfermedad.
El dueño de la burra finalmente la sacrificó al enterarse lo que pasó.
Más detalles en el video.
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