La obra recibió varias críticas, incluso antes de su inauguración, por parte de los vecinos quienes se quejan por la odisea que viven al tratar de cruzarla.
Natale Fabri, sacerdote de la iglesia La Piedad, manifestó a RDN su preocupación ya que la autopista deja a la parroquia aislada e impide a los feligreses acercarse hasta el lugar como lo hacían antes.
El sacerdote había solicitado la construcción de un viaducto peatonal, si bien dicho paso existe, es difícil para los vecinos cruzar por el sitio, porque tiene salida una calle desolada.
A ello se suman los motociclistas que utilizan el paso peatonal como arteria, además de los delincuentes que se reúnen en la zona.
Días atrás se registró un accidente donde resultó gravemente herido un joven que intentó cruzar la mencionda avenida, el mismo fue arrastrado varios metros por una camioneta.
Pese a los reclamos, los vecinos no reciben respuestas de las autoridades.
“El viaducto peatonal más que una solución es un problema, porque genera pérdida de tiempo, miedo y todo tipo de riesgos al intentar cruzar”, indicó una vecina del barrio.
