El magnate está decidido a hacer “grande de nuevo a EEUU” y para ello ha dejado el discurso para pasar a la acción. En el plano bélico dio muestras en la última semana que no andará con medias tintas en cuanto los problemas más acuciantes en el plano internacional.
La semana pasada ordenó bombardear instalaciones militares sirias, luego de que el régimen de Bachar al Asad haya supuestamente atacado una localidad con armas químicas. Asimismo, autorizó el desplazamiento de un portaaviones a región de la península coreana, en un claro mensaje hacia el régimen norcoreano de Kim Jong-un.
Hoy, en otra muestra de su cruzada contra los mayores enemigos de EEUU, se dio a conocer que Trump también dispuso el bombardeo de presuntas instalaciones del Estado Islámico en Afganistán. Según los datos, la Fuerza Aérea de EEUU utilizó el mayor artefacto no nuclear que posee, un explosivo conocido como “la madre de todas las bombas”.