El alto jefe policial, quien estuvo presente en el lugar la fatídica madrugada del 1 de abril pasado cuando murió el dirigente azul, fue imputado por el Ministerio Público por inducir a un subordinado a cometer un hecho punible. La fiscala Lorena Ledesma pidió su prisión.
Además de Paredes Palma, también el oficial Guido Amarilla fue imputado por tentativa de homicidio doloso. El hombre había también ingresado al interior de la sede partidaria, donde disparó contra personas que se refugiaban en el interior de un baño.
